Diez años de photolocus
Apurando las últimas horas y antes de marchar de nuevo a Islandia a la vigésimo octava edición del viaje fotográfico y al que ésta misma madrugada partimos, tenía que dejar lista una de las faenas. Un rápido repaso y trepidante carrusel, en forma de spot audiovisual que no es sino un pequeño esbozo, de cómo lo han sido estos diez años, y que han pasado volando, con pinceladas de algunas de las miles de imágenes y registros de archivo, mías y de muchos otros y que servirá el próximo día 16 de marzo en Siresa, en la fiesta del X Aniversario, para recordar y agradecer a todos los que nos han acompañado durante estos diez años con un objetivo común y entorno a una pasión que nos une, la fotografía y el viaje.
Para mi no sólo es algo emotivo, por lo que confiere, a pesar de las dificultades, salir, crecer y mantenerse en los peores años de la crisis, que ha sido posible, probablemente por entender desde un principio cuáles eran nuestras metas, y ser más testarudos que un piedro.
Sólo podemos, dar “Gracias” a todos y cada uno de los más de mil clientes y amigos que en esta gran familia de photolocus han coincidido y se han juntado a lo largo de estos años en las diferentes actividades, viajes, cursos, talleres, privados, para seguir viviendo la fotografía y el viaje de una manera distinta y diferente, y que nos ha permitido estar hoy aquí celebrando y preparando sin parar y con la misma ilusión que antaño, pero mucha más experiencia, nuevas aventuras fotográficas en las que seguir creciendo los próximos años y aprendiendo juntos a vivir ese único viaje, que tenemos cada uno para disfrutar.
Gracias y felicidades a todos los “photolocos”
Nos vemos a la vuelta, en el X Aniversario Photolocus, en Siresa el 16 y 17 de marzo
De la filosofía y los objetivos de Photolocus, aquí tenéis algo más detallado como han sido estos diez años, lo que nos propusimos entonces y como ha llegado hasta hoy, sin necesidad de administraciones, subvenciones, o políticas de difusión, aún siendo su base un proyecto de puesta en valor de la cultura tradicional, rural, de difusión medioambiental, y muestra de la necesidad de un desarrollo rural sostenible, a través de las actividades de fotografía, como herramienta de difusión y promoción eficiente, ética y fuera del oportunismo de los circuitos turísticos.